Cuando hablamos de branding, hablamos de crear un mensaje que dé a conocer nuestros productos o servicios. No hablamos solo de un logo o un diseño, sino de la comunicación entre tú y el cliente. Tu marca, es lo que define tu negocio. Es su esencia. Su identidad.
En el proceso de creación de un branding, se tienen en cuenta los valores que la empresa quiere comunicar y se inicia un estudio con el fin de conocer cuál es su público objetivo. De esta forma, se busca crear un vínculo con el cliente, lo que da como resultado la fidelización del mismo.
Es de vital importancia mantener una relación creíble y duradera con el consumidor y que, además, se base en la confianza. Por eso, es tan conveniente generar un universo gráfico alrededor de la marca que le permita diferenciarse de las demás.
A continuación, te explicaremos de forma un poco más detallada varios de los motivos por los que hoy en día es necesario una buena imagen de marca.
1 – Aumenta el valor de tu producto o servicio.
Supongamos que estás buscando un producto o servicio y encuentras dos empresas distintas en internet que ofrecen lo mismo. Entras a sus respectivas páginas webs y descubres que una de ellas solo tiene información de contacto, mientras que la otra ofrece una imagen muy profesional, además de mucho contenido. Aunque el precio de la segunda sea más alto, probablemente elijas esta, ya que su imagen te transmite mucha más seriedad que la otra.
Si tu imagen avala tu profesionalidad, se incrementa el valor de tu empresa además de su reputación, por lo que puedes permitirte un precio mayor.
2 – Te diferencia de la competencia.
Hoy en día, en un mercado tan competitivo, es fundamental obtener un reconocimiento positivo instantáneo dentro de tu sector.
El branding incluye elementos visuales tales como el logotipo, la tipografía, el nombre, los colores y el tono con el que se habla, entre otros. Todos estos elementos en conjunto ayudan a mostrar el atractivo del producto o servicio y posicionar la marca.
En resumen, la finalidad del branding es garantizar el éxito de tu marca, resaltando sus valores diferenciales.
3 – Fomenta la fidelidad entre tus clientes.
Es de vital importancia que tu imagen logre transmitir transparencia y calidad, ya que se incrementa la confianza y la conexión emocional con el consumidor. Esto ofrece a tus clientes una sensación de pertenencia a una comunidad con determinados valores compartidos y crea ilusión a través de expectativas.
La comunicación tiene que adaptarse a la naturaleza de cada empresa y al producto o servicio que promociona. Por eso es necesario crear una identidad corporativa acorde con lo que tu empresa quiere contar.
4 – Evita futuros problemas.
La identidad corporativa debe de acompañar a tu empresa a lo largo del tiempo y convertirse en un aliado.
Para que en un futuro no surjan problemas inesperados, es muy importante crear una marca capaz de adaptarse al crecimiento de tu negocio, a los cambios que se puedan dar con el paso del tiempo, o incluso a la utilización de nuevos soportes y otros medios de reproducción. Una buena marca debe de responder y poder utilizarse desde cualquier medio digital hasta todos los medios físicos que puedas imaginar.
Para entender esto, supongamos que tienes una marca que hasta ahora te funciona, pero con el tiempo surge la necesidad de imprimir el logotipo en un material distinto y tu marca no te lo permite.
¿Qué ocurriría si se llegase a ese punto? En ese caso habría que plantearse crear una nueva marca o por el contrario renunciar a las ventajas que podría suponer dicho cambio.